Que Apple es la empresa más valiosa del mundo en términos de capitalización bursátil ya es sabido. Que Trump en varias oportunidades los atacó por producir sus productos en China – fundamentalmente a través de la polémica Foxxcon – también. Lo que hasta hace poco resultaba impensable era la posibilidad de que Apple se adhiriera a la reciente política impositiva impulsada por Trump para repatriar capitales y cuando hablamos de esta empresa, hablamos también del mayor contribuyente impositivo de Estados Unidos. Los volúmenes son inmensos, el impacto que cada uno de estos movimientos tiene, también.
Esta decisión impactó positivamente en el valor de Apple y significa un enorme triunfo político de Donald Trump.
En una decisión histórica Apple se compromete a repatriar hasta 252.000 millones de dólares, (prácticamente la mitad del PBI de Argentina o incluso más que todo el PBI de Chile) y hacer un pago de impuestos de 38.000 millones de dólares, lo que representaría el pago de impuestos más grande de toda la historia, algo inimaginable algunos meses atrás cuando se peleaban públicamente. La repatriación también incluye la generación de 22.000 nuevos empleos en los próximos 5 años en Estados Unidos y la generación de 350.000 millones de dólares de actividad económica.
El mismo Donald Trump no dudó en celebrar este éxito político en su cuenta de Twitter.
I promised that my policies would allow companies like Apple to bring massive amounts of money back to the United States. Great to see Apple follow through as a result of TAX CUTS. Huge win for American workers and the USA! https://t.co/OwXVUyLOb1
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 17 de enero de 2018
Estos 38.000 millones representan el pago de impuestos más grande de toda la historia.
Esta decisión impactó positivamente en el valor de Apple y significa un enorme triunfo político de Donald Trump. Su política económica empieza a tener los primeros éxitos.
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