Se calcula que al menos un millón de los casi 9 millones de ciudadanos israelíes consumen marihuana con habitualidad. El consumo recreativo sin embargo, fue despenalizado hace apenas un año lo que lo transformó en el primer país de Medio Oriente que despenaliza su uso, aunque no en vanguardia. La premisa que orienta esta nueva política es similar a la que se está imponiendo en algunos países como Portugal, hacer del tema drogas un asunto médico y dejar de hacer un asunto policial. De todas maneras su consumo está despenalizado, pero no legalizado totalmente. Subsiste un sistema de multas crecientes. La primera vez habrá que pagar unos 300 dólares, la segunda 600, la tercera habrá que asistir a un curso o una capacitación acerca del uso y recién a la cuarta vez habrá una investigación y sanciones de otro tipo como prohibir la portación de armas o retirar el registro de conducir.
Más allá de esta política acerca del consumo recreativo, Israel es el indiscutido líder mundial en la investigación y el desarrollo del cannabis para uso medicinal. Hace más de cuarenta años que viene trabajando en sus Universidades y Centros médicos de investigación con diferentes proyectos de trabajo focalizados en desarrollar el uso medicinal de la marihuana y tiene el programa médico más importante del mundo en esta materia. En los últimos años se calcula que más de 20.000 personas se han beneficiado de su uso.
Cuando hablamos de cannabis medicinal nos referimos al uso de los llamados cannabinoides para tratar determinados síntomas o para aliviar determinadas situaciones vitales como por ejemplo la de los enfermos terminales. Las propiedades de la marihuana son múltiples y en la elaboración de los aceites se producen múltiples combinaciones de cannaibinoides que producen en esas combinaciones diferentes efectos y a los que se les encuentra cada vez más propiedades que parecieran afectar positivamente determinadas dolencias. Es importante distinguir el cannaibinoide más famoso, el llamado THC, que es el que principal componente psicoactivo, el que «droga» a las personas por decirlo de una forma sencilla. La planta posee muchísimos cannaibinoides más entre los que se destaca fundamentalmente el CBD por sus tremendas propiedades curativas frente a determinadas dolencias.
Hace más de cuarenta años que viene trabajando en sus Universidades y Centros médicos de investigación con diferentes proyectos de trabajo focalizados en desarrollar el uso medicinal de la marihuana y tiene el programa médico más importante del mundo en esta materia. En los últimos años se calcula que más de 20.000 personas se han beneficiado de su uso.
El cannabis medicinal se consume de varias maneras, ya sea en forma de aceites, vaporizadores, fumándolo, en cápsulas o hasta en aerosoles orales. Se utiliza para tratar desde migrañas – afirman un 85 % de efectividad – hasta epilepsias, diabetes,mieloma, psioriasis, esclerósis múltiple, estrés post traumático, trastornos del espectro autista, cáncer – frente a los que se ha demostrado sus beneficios antitumorales – entre otras dolencias. También se lo utiliza para mejorar el apetito con pacientes con quimioterapia, aparentemente también prevendría el deterioro cognitivo y se está experimentando con ciertos grados de avances en enfermedades neurodegenerativas como el Alzeheimer y el Parkinson.
El desarrollo de la industria del cannabis medicinal podría reportarle a Israel en un futuro cercano importantes beneficios económicos, eso si, todavía falta que avance una reglamentación mundial que permita la exportación y el comercio en un planeta que todavía sospecha que cualquier cosa que tenga que ver con la marihuana es narcotráfico. De hecho el cannabis se vende en farmacias a un precio de unos 34 dólares los 10 gramos. En Estados Unidos la industria de la marihuana ya es un negocio millonario, y lo será mucho más cuando se consolide su vecino Canadá que también aprobó la legalización del consumo este año.
Se utiliza para tratar desde migrañas – afirman un 85 % de efectividad – hasta epilepsias, diabetes,mieloma, psioriasis, esclerósis múltiple, estrés post traumático, trastornos del espectro autista, cáncer – frente a los que se ha demostrado sus beneficios antitumorales – entre otras dolencias.
La Universidad Hebrea de Jerusalén tiene un centro de investigación multidisciplinario, lo mismo la Universidad de Ariel sumado a múltiples institutos de investigación agrícola que les han permitido desarrollar nuevas cepas de cannabis con diferentes graduaciones y tipos de cannabinoides, se calcula que se producen unas 230 variedades diferentes. Investigadores de la Universidad Hebrea han sintetizado 22 versiones del cannabinoide THC, por ejemplo. El encuentro mundial más importante se llama CannaTech y obviamente se realiza en Israel que tiene sus aceleradoras focalizadas en salud en general y en el cannabis medicinal en particular entre las que se destacan OWC Pharmaceutical Research o Breath of Life Pharma que trabajan para el Ministerio de Salud. Por último también han desarrollado una industria de dispositivos con los cuáles mensurar y administrar el cannabis en sus diferentes facetas incluyendo tabletas, parches, vaporizadores, inhaladores nasales o cigarrillos electrónicos entre otros.
Israel aspira a pronto poder habilitar sus exportaciones de cannabis medicinal hacia el mundo y las expectativas hablan de que podrían superar los 280 millones de dólares de ingresos para el país al año. Veremos cómo sigue evolucionando la discusión acerca de la marihuana a nivel mundial, todo indica que este año tendremos novedades en varios países más, por lo pronto el nuevo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha manifestado su voluntad de impulsar la discusión sobre la despenalización a nivel mundial en el ámbito de las Naciones Unidas.
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