En estas horas Twitter y Facebook acusan a China de utilizar miles de cuentas falsas – conocidas como bots – para atacar a los líderes y las protestas que se llevan a cabo en Hong Kong en los últimos días. Ambas redes sociales están prohibidas en territorio chino por lo que el gobierno a tenido que utilizar tecnología sofisticada con el fin de influir en la discusión pública que se suscita en ambas redes respecto a la situación de Hong Kong.
Hong Kong pertenece a China después de que el Reino Unido cediera su gobierno a partir de 1997 aunque tiene un sistema político y económico diferente que la China continental. En 1984, cuando comenzaron las conversaciones diplomáticas Deng Xiapoing impuso el término de «Un país, dos sistemas» para impulsar la reunificación china con Macao y Hong Kong. Ese respeto a dos sistemas diferentes entró en crisis por una ley de extradición – ahora suspendida – que China pretendía aplicar en Hong Kong y que ha desatado fuertes protestas en toda la región administrativa por temor a perder las libertades y entrar en un sistema con restricción de derechos como pareciera ser el sistema de crédito social chino. Incluso varios organismos de derechos humanos denuncian la utilización del sistema de reconocimiento facial por parte de las autoridades para identificar y sancionar a los manifestantes. Diversas imágenes difundidas en los noticieros dan cuenta de la utilización de rayos laser por parte de los manifestantes para evitar ser identificados por las cámaras de seguridad.
Ese respeto a dos sistemas diferentes entró en crisis por una ley de extradición – ahora suspendida – que China pretendía aplicar en Hong Kong y que ha desatado fuertes protestas en toda la región administrativa por temor a perder las libertades y entrar en un sistema con restricción de derechos como pareciera ser el sistema de crédito social chino.
Lo que en verdad se discute cuándo Twitter y Facebook acusan a China es la censura en la era de internet – ninguna de las dos redes pueden ser utilizadas en China – y la disputa por la discusión que sucede en esas redes. Según un comunicado emitido por Twitter el lunes tiene «pruebas fiables para apoyar que se trata de una operación coordinada por el Estado» y que esas cuentas «estaban deliberada y específicamente tratando de sembrar las desavenencias políticas en Hong Kong, incluyendo socavar la legitimidad y las posiciones políticas del movimiento de protesta sobre el terreno».
Las protestas no parecen cesar al punto de que en los últimos días – según los organizadores – los manifestantes llegaron a ser 1,7 millones de personas. El gobierno chino ha emprendido un camino de diálogo para aplacar el tema y hasta Donald Trump se ha manifestado en sugerirles encontrar una salida rápida al conflicto antes de que siga escalando y hasta ha amenazado con aumentar las tensiones entre Washington y Beijing si eso no se normaliza.
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