Hace algún tiempo escribimos acerca del drama que estaba viviendo la India respecto a lo rápido que corrían las noticias falsas por WhatsApp y cómo eso estaba ocasionando lapidaciones o falsos rumores que terminaban con turbas y muchedumbres enfervorizadas asesinando una persona bajo la creencia de que era parte de una banda que abusaba menores. Este año también vivimos el escándalo de cómo la consultora Cambridge Analytica había utilizado información de Facebook para inmiscuirse e influenciar la campaña electoral norteamericana. Bueno, estamos ante un nuevo capítulo de Fake News y política: la elección de Brasil.
El proceso comunicacional es bien simple: se inventa una historia sobre el candidato contrario apuntando a un electorado determinado y se lo bombardea por WhatsApp bien segmentado. Por ejemplo, hubo algunas noticias que sindicaban a Fernando Haddad como promotor de una ley de educación sexual o del aborto que fue enviado a un electorado cristiano capaz de replicar ese contenido y espantar votos del PT de esos sectores. Los mensajes múltiples incluían la potestad de indultar a Lula y encubrir la corrupción, la participación en actividades delictivas o ser un agente de Nicolás Maduro y un plan transnacional para dominar el Brasil bajo la égida del comunismo internacional.
El proceso comunicacional es bien simple: se inventa una historia sobre el candidato contrario apuntando a un electorado determinado y se lo bombardea por WhatsApp bien segmentado.
Si bien Bolsonaro se apuró en declarar desconocer totalmente si se usa ese tipo de campañas y que las reprueba claramente cada vez aparecen más pruebas de empresas que apoyan su candidatura que han conseguido y utilizado bases de datos de forma electoral. Aparentemente el Tribunal Electoral está investigando en reserva a un grupo de empresarios que habrían realizado aportes de forma ilegal, violando la ley de financiamiento de campaña para financiar este tipo de campañas negativas contra el candidato del Partido de los Trabajadores. También trascendió que WhatsApp le suspendió la cuenta al hijo de Bolsonaro por difundir información falsa.
Incluso el candidato Fernando Haddad ha planteado – en un evidente guiño a sectores evangélicos – que los partidarios de Bolsonaro ni siquiera se abstienen de contruir Fake News ni con las Sagradas Escrituras.
Eles fazem fake news até com a Bíblia Sagrada. Lamentável. pic.twitter.com/lEnmP8rdNA
— Fernando Haddad 13 (@Haddad_Fernando) 22 de octubre de 2018
Aparentemente el Tribunal Electoral está investigando en reserva a un grupo de empresarios que habrían realizado aportes de forma ilegal, violando la ley de financiamiento de campaña para financiar este tipo de campañas negativas contra el candidato del Partido de los Trabajadores. También trascendió que WhatsApp le suspendió la cuenta al hijo de Bolsonaro por difundir información falsa.
Como sea las encuestas son concluyentes y a no ser que surja un imponderable muy espectacular en esta última semana está claro que Jair Bolsonaro será el próximo presidente de Brasil, cuando asuma Latinoamérica entrará de lleno en la era de los nuevos liderazgos populistas: los de la extrema derecha.
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